Las
palabras que leerás a continuación, fueron escritas por un líder juvenil de
Zimbabwe, poco antes de ser asesinado por su fe en Dios
Soy
parte del equipo de los que no se avergüenzan
Tengo
el poder del Espíritu Santo
La
muerte ha sido sepultada
Me he
parado mas allá del límite
La
decisión ha sido tomada
No
miraré atrás, no me rendiré, ni disminuiré mi velocidad ni me quedare quieto
Mi
pasado ha sido redimido, mi presente tiene sentido, y mi futuro esta seguro
No
quiero saber nada con la vida debajo de mi potencial
nada
de rodillas flojas, de sueños descoloridos, de palabras sin sentido, de
ofrendas baratas, o metas mediocres
Mis
ojos esta definidos, mi pulso es rápido, mi meta es el cielo, mi camino es
angosto, mis compañeros pocos, y mi misión clara
No
puedo ser comprado, comprometido descarriado o retrasado
No
voy a pestañear ante el sacrificio, ni temer ante el enemigo, ni deambular en
los campos del conformismo
No me
rendiré ni callaré hasta que avance y conquiste por la causa de Cristo.
Soy
un discípulo de Jesús :)
Que
bueno sería, que cada uno de nosotros podamos hacer nuestras, estas palabras,
día a día. Ese sería un gran desafío...