26 jun 2014

Caminos inciertos

No hay nada más frustrante que estar en esos momentos de la vida donde no sabes donde estas parado. No sabes donde dar el próximo paso, y mucho menos el cómo darlo. Esa sensación de estar caminando a oscuras en un lugar completamente desconocido, no hace más que inundarnos de miedo. Empiezan a surgir dudas y muchas preguntas.

Pasan los días y seguimos caminando sin saber a dónde vamos. Terminamos pensando que todo va a salir mal. Desconfiamos y tratamos de hacer lo que nos parece mejor a nosotros, olvidando que esa no es la actitud más sabia a tomar cuando no sabemos ni donde estamos parados. Nos llenamos de MIEDO y eso provoca solo tres cosas: Nos hace retroceder, nos paraliza, o nos hace avanzar...nos impulsa.

Y es ahí donde entra en juego nuestra personalidad. Es ahí cuando nos encontramos cara a cara con nosotros mismos...ahi nos conocemos realmente, y vemos como reaccionamos frente al miedo, a la incertidumbre. Nos damos cuenta de que estamos hechos. Y en la mayoría de los casos, tarde o temprano, nos damos cuenta que la mejor opción es utilizar ese miedo para continuar, ese miedo nos debe impulsar y permitir salir adelante.
Necesitamos avanzar, pero para eso, debemos avanzar seguros. ¿Seguros de que? El único que te puede dar seguridad en estos casos es Dios. Solo el te puede dar paz y tranquilidad en esos momentos.

Tal vez no responda tus dudas, no te diga donde estas, ni hacia dónde vas. Pero lo que si va hacer es tomarte de la mano y susurrarte al oído: “Todo va a estar bien...confia en mi y esperá en mi…” Es en ese momento, donde tus dudas desaparecen, y tu miedo se esfuma. Es en ese momento donde las circunstancias son las mismas, pero vos no.

Tal vez sigas sin saber a dónde vas, solo que ahora sabes que no vas solo…


Por Evelyn Delmastro

No hay comentarios.:

Publicar un comentario