10 sept 2013

Montaña Rusa

Son ese tipo de juegos caracterizados por la velocidad y el constante subir y bajar. Otra gran característica, es la adrenalina que genera subirse a una de ellas (Siempre y cuando te pongas el cinturón).
Hace un tiempo, llegué a la conclusión de que probablemente la vida (o por lo menos la mía) es algo similar a una montaña rusa. A veces estamos abajo, en cualquier aspecto de nuestra vida, y las cosas no parecen tener mucho sentido.
En esos momentos, abundan las frases como: “Siempre que llovió, paró” o “Después de la tormenta siempre sale el sol” Y es verdad, luego de repente, todo mejora, la tormenta pasó y estamos en la cima de la montaña rusa. Por unos segundos, contemplamos lo que nos rodea, desde otra perspectiva. Nos damos cuenta que después de todo, nada de lo que nos pasaba era tan malo como creíamos. Pero luego del sol, vuelve la tormenta, y tan rápido como subimos, bajamos. Pero más adelante volveremos a subir, y a bajar, y así sucesivamente.
Probablemente eso es algo que no nos gusta en nuestra vida, que haya momentos lindos, donde estemos bien arriba, y otros no tanto.  Bajar y subir constantemente. Cada vez que está todo bien, solo es necesario mirar para abajo, y ver como por algún motivo u otro las cosas no salen como nos gustaría. Sabemos que el buen momento dura poco. Nos preguntamos por que es necesario bajar. O tal vez no nos gusta el hecho de que todo ocurra tan rápido. Es como si la vida avanzara más rápido de lo que podemos asimilar. No terminamos de vivir algo, que ya estamos en otra situación distinta.
Pero son esas cosas, las que hacen que la vida tenga esa especia de adrenalina que tiene. Hace que no sea aburrida, hace que todo tenga sentido, hace que crezcamos como personas. Si una montaña rusa no fuera rápida, o no bajara y subiera, no sería muy entretenida que digamos. Si nuestras vidas no tuvieran momentos buenos y malos, poco sentido tendría. Pero cabe destacar que para disfrutar todo eso (la montaña rusa y nuestra vida) sin morir en el intento, hay que usar cinturón. Es lo que nos da seguridad para enfrentar cualquier circunstancia que se nos presente. En mi vida, puedo afirmar que esa seguridad es Dios. Cuando Dios creó al ser humano, y le dio esa vida de montaña rusa, también le ofreció de su seguridad.
A veces la gente cree que porque vas a una iglesia no tenes problemas, pero eso no es así. Todos tenemos una vida llena de subidas y bajadas a toda velocidad, con la diferencia que los que aceptamos que Dios sea nuestro seguro, nos ayuda a enfrentar mejor la vida, sin tanto riesgo.
Vos ¿Estás dispuesto a ponértelo  y seguir en esta montaña rusa, de forma más segura?


Por Evelyn Delmastro

No hay comentarios.:

Publicar un comentario