¿Quien es Jesus?

Jesús es aquel que dio su vida por nosotros.
Jesús es aquel que vino a rescatarnos. Es nuestro salvador y redentor.
Jesús es quien viene a sacarnos del naufragio, es aquel que nos saca del pozo mas profundo…
Jesús es amor, en él encontramos esperanza, Jesús es la esperanza de este mundo.
Jesús es poderoso, es magnífico. Jesús es precioso en su totalidad.
Es glorioso, Jesús es único…
Jesús es un amigo, es aquél que en momentos de angustia y desesperanza nos da su hombro para que lloremos. Jesús es nuestro amparo, nuestro refugio, nuestro consolador…
Jesús es la luz en medio de un mundo de oscuridad y maldad, es la luz resplandeciente en un mundo de violencia, muerte y soledad, es aquel que hace renacer todo lo muerto.
Jesús es aquel que hace de tu vida un milagro…
Jesús es el camino, es la verdad y la vida, Jesús es el que sana, el que restaura y el que transforma.
Jesús es aquel que convierte el odio en amor, la mentira en verdad, la muerte en la vida.
Jesús es quien convierte el dolor y la tristeza en alegría y gozo.
En Jesús encontramos la paz que necesitamos, en él encontramos el camino. Es nuestro guía, nuestra brújula en medio de un océano.
Jesús es nuestro protector, es nuestro consejero…
Es aquél que derramó su sangre por nosotros, que murió por nosotros, Jesús es quien resucitó, Jesús fue quien a la muerte venció.
Jesús es aquel que te abraza con eterno amor, es quien reconstruye tu vida cuando piensas que ya todo esta perdido…
Jesús es quien nos da valor, él fue quien primero nos amo.
Jesús es aquel que nos lleva más allá de lo soñado… mas allá de lo que podamos imaginar.
Jesús tiene amor infinito. Jesús es nuestra compañía, es aquel que siempre esta presente en todo momento de nuestra vida.
Es aquel que nos da su mano cuando caemos, Jesús es nuestro sustento.
Jesús es valiente, es aquel que nunca deja de creer en nosotros…
Jesús es quien une los cielos y la tierra, es aquel que une lo divino, es quien une el inmenso amor de Dios con nosotros, es aquel que crea ese lazo que nos une con nuestro Padre Celestial…

Por Lucas Sevcik