16 ago 2012

Yo también pasé por eso



HEBREOS 2:17-18
• ¿Se preocupa el hijo de Arnold Schwarzenegger si no puede abrir la tapa de un frasco de dulce?
• El hijo de Phil Knight, fundador de la fábrica de zapatillas NIKE ¿Se preocupa si se le rompen los cordones de sus zapatillas?
• O si a la hija de Bill Gates, creador del sistema operativo Windows, no le prende la computadora ¿Entra en pánico?
Seguramente no. ¿Y qué de nosotros? ¿Y si nos pasa algo, debemos preocuparnos? ¿No somos acaso hijos de Dios? ¿No dice la Biblia que Dios se hizo hombre y caminó entre la gente en la persona de Jesús, y El vivió y pasó lo que nosotros pasamos? ¿Puede Dios entendernos?

 Yo pasé por eso. Es una frase que en esta noche la va a escuchar  muchas veces de parte de Jesús. Desde su nacimiento como hombre Jesús se ha identificado con nosotros en todas las variantes.
• Hay personas que a veces tienen una baja autoestima por su condición social, o se sienten menos que otros por su pasado, pero tena en cuenta que Jesús nació en un pesebre, rodeado de animales, con un particular aroma y vista a su alrededor.
• Su niñez fue humilde, tanto es así que cuando sus padres lo presentaron en el templo ofrecieron 2 tórtolas que era la ofrenda de los pobres. Lucas 2: 22-24. En Levítico 5:7 dice que si no tenían un cordero debían traer tórtolas al altar.
• La ausencia de José en la vida adulta de Jesús sugiere que María quizás crió sola a Jesús y sus hermanos.
• Jesús era reconocido, no como el Hijo de Dios, sino como un carpintero como dice Marcos 6:3. Una persona común.
• A usted que le parece… ¿Llamaba la atención con su físico y su apariencia? ¿Había una aureola sobre su cabeza y lo seguía una luz desde el cielo? Miren lo que dice Isaías 53:2. Su aspecto era de lo más común, como tal vez cualquiera de nosotros.
• ¿Es usted pobre? ¿Tiene escasez? Jesús sabe como se siente. Un día tuvo que pedir una moneda prestada para ilustrar un sermón. Mateo 22:9. Aquí hablaba sobre la famosa frase “Al César lo que es del César”.
• ¿Ha sentido alguna vez que se aprovecharon de usted? Jesús pagó impuestos a un emperador extranjero.
Jesús pasó por todo esto. Pero si usted está en otra situación, y no vive un momento penoso como otros, si usted dirige un negocio, o una empresa, habla ante muchas personas por su trabajo, o dicta clases entre otras cosas, ¿podría ser entendido por Jesús? Por supuesto que sí.
• Jesús reclutó gente y supervisó su propia organización. Setenta hombres y muchas mujeres buscaban dirección en El. Lucas 10:1.
• ¿Hace usted presupuestos, preside reuniones, contrata personal, es líder en una iglesia?  Jesús sabe que el liderazgo no es fácil. Su grupo incluía un celote, Simón, que era miembro de un grupo judío político y religioso que odiaba a los romanos, y un recaudador de impuestos, Mateo, que había trabajado para ellos. La madre de uno de sus hombres claves, Santiago y Juan, exigía un trato especial para sus hijos. Mateo 20:20, 21. Jesús comprende el estrés del liderazgo, sabe de qué se trata eso.
• ¿Se ha sentido con ganas de escapar alguna vez? A Jesús le pasó. Marcos 1:35.
• ¿Ha tenido muchas exigencias que no ha tenido tiempo para almorzar? Marcos 6:31
• ¿Tiene muchos mails que contestar, o muchos cuadernos que corregir, o tiene mucho que hacer en su casa o trabajo? Había días en que Jesús no daba abasto. Mateo 15:30.
• ¿Cómo se lleva con los niños? ¿Le gusta estar con ellos? Algo había en Jesús que atraía a los niños. Mateo 19:13
•  ¿Pasó usted por un momento de tensión familiar? Marcos 3:21.
• ¿Lo han acusado falsamente a usted? Los enemigos de Jesús decían cualquier cosa de El. Mateo 11:19 y 26:59.
• ¿Lo han decepcionado sus amigos? Cuando Jesús necesitaba ayuda de sus amigos, discípulos, se durmieron y El se los hace saber según vemos en Mateo 26:40.
• ¿Está inseguro del futuro? Jesús lo estuvo. Un día lo dijo, Mateo 24:36. ¿Puede Jesús ser el Hijo de Dios y no saber algo? Puede, si decide que así sea. Al saber que usted enfrentaría lo desconocido, decidió enfrentar lo mismo.

Jesús ha pasado por todo esto. Experimentó sufrimiento y tentación. Hebreos 2:18.
• Jesús se enojó tanto que limpió el templo. Mateo 21:12-13.
•  Tuvo tanta hambre que comió granos crudos. Mateo 12:1.
• Se cansó tanto que se durmió en una barca, en medio de una tormenta. Mateo 4:37-38.
• Y tuvo tanto miedo que sudó sangre. Lucas 22:44.
• Se entristeció tanto que lloró en público cuando murió su amigo Lázaro. Mateo 28:35.
Sin embargo, ¿por qué, el Hijo de Dios, soportó el dolor terrenal? Para que usted supiera que El puede entender el clamor de quienes padecen sufrimientos, pruebas y tentaciones. Cualquier cosa que le toque enfrentar, Jesús sabe como se siente. Cuando usted va hacia El por su ayuda, El corre hacia usted para ayudarlo. Porque El sabe como se siente, El pasó por eso. Y si está seguro que Jesús no vivió lo que usted vive hoy, le recuerdo que Jesús lo sabrá, lo entenderá, porque sino El lo vivió, lo sabrá porque también es Dios.
El es hombre y Dios al mismo tiempo. Necesitamos un Salvador que sea Dios y Hombre al mismo tiempo. Un Jesús sólo Dios nos podría crear, pero no comprendernos. Un Jesús sólo Hombre podría amarnos pero no salvarnos.
Por eso un Jesús Dios y Hombre a la vez están suficientemente cerca para tocarlo, para hablarle y es suficientemente fuerte para confiar en El.

Por Eduardo Delmastro

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